lunes, 11 de marzo de 2013

Jorge Fuenzalida


Tuve la suerte de conocer a Andrea justo en el momento en que ya perdía las esperanzas de recuperación, por una larga y dolorosa crisis producida por una espondilitis anquilosante (enfermedad autoinmune).

Después de ingerir corticoides e inmunosupresores, además de las kinesioterapias por un tiempo prolongado y cuando estoy sintiendo que mi organismo ya los rechaza, me atreví a probar con esta nueva alternativa, total no tenía nada que perder… Y bueno, lo más sorprendente fue que después de la tercera sesión, osea dentro del primer mes, ya comencé a sentir muy levemente que algunos de mis puntos de dolor disminuían en su intensidad, lo que por lo menos me permitió dormir por las noches sin dolor (quien padece esta enfermedad lo entenderá).

Después del segundo mes, avancé más que en dos años de tratamiento, esto me permitió retomar - en la medida de lo posible - lo que más me apasiona, que son las actividades de montaña, y poder volver a esos lugares que en algún momento pensé no volvería más.

Es increíble pasar por la más oscura desesperanza, para volver a la luz nuevamente. Hoy después de aprox. cinco meses de relajada terapia con Andrea, he logrado un 90% de mejoría y eso me tiene nuevamente feliz y lleno de energía.

Mil gracias Andrea por devolverme la salud y la alegría, por lo menos hoy puedo ver mis cumbres un poco más cerca".

Jorge Fuenzalida
Santiago – Chile